Operas MET – Ópera Francesa
Los Domingos de julio
Todos los domingos de julio, Stingray Classica trae a su pantalla uno de los mejores teatros de ópera del mundo, el Metropolitan Opera House de Nueva York, con una serie de increíbles estrenos. Esta serie presenta tres de las obras más famosas de compositores franceses. El 12 de julio, el director canadiense Yannick Nézet-Séguin dirige la Orquesta del MET y los renombrados solistas Isabel Leonard (mezzosoprano), Karen Cargill (soprano) y Erin Morley (soprano) en una apasionante interpretación de Diálogos de Carmelitas, de Francis Poulenc. El domingo siguiente, 19 de julio, ofrece otra obra maestra francesa: Carmen de Georges Bizet, bajo la batuta de Louis Langrée. La ópera fue criticada en su estreno por su flagrante inmoralidad, pero se convirtió en una pieza clave del repertorio operístico. Finalmente, el 26 de julio, Sir Mark Elder dirige la orquesta del MET en una representación de la obra maestra de Camille Saint-Saëns, Sansón y Dalila. La obra es conocida como la representación arquetípica de un hombre traicionado por una mujer, y ha influido en muchas obras del acervo cultural de hoy en día.
Poulenc - Diálogos de carmelitas
Domingo, el 12 de julio
Una de las óperas más exitosas del siglo XX, Diálogos de carmelitas, es un caso raro de una obra moderna que es igualmente apreciada por el público y los expertos. Yannick Nézet-Séguin dirige la Ópera del Metropolitan en esta interpretación de la apasionante ópera de Francis Poulenc, basada en la obra de Georges Bernanos. Cuenta la historia de una comunidad de monjas carmelitas durante la Revolución Francesa que deciden enfrentarse a la muerte en la guillotina en lugar de renunciar a sus votos. Poulenc era un parisino urbano con una profunda dimensión mística y la ópera aborda tanto la vida interna de los personajes como sus realidades externas; es en igual medida histórica, psicológica y espiritual. Con la participación de Isabel Leonard (mezzosoprano), Karen Cargill (soprano) y Erin Morley (soprano). Esta producción se grabó en el Metropolitan Opera Hall de Nueva York (EE.UU.) en 2019.
Bizet - Carmen
Domingo, el 19 de julio
Louis Langrée dirige la Ópera del Metropolitan en una representación de la obra maestra de Bizet de la seductora gitana que vive según sus propias reglas, sin importar las consecuencias. La melodía de la ópera es tan irresistible como el propio personaje del título, una fuerza de la naturaleza que se ha convertido en una figura cultural definitiva. Este drama de un soldado dividido entre hacer lo correcto y perseguir a la mujer a la que no puede resistirse, estalla con sus melodías y vibra con toda la vitalidad erótica de su inolvidable personaje principal. Carmen fue un escándalo en su estreno y fue rotundamente denunciada en la prensa por su flagrante inmoralidad. El poder de la música y el drama, sin embargo, crearon también la voz de una parte del público a favor de la obra. El compositor Tchaikovsky y el filósofo Nietzsche elogiaron la ópera, identificando, este último, en la robustez de la partitura nada menos que una cura para los males espirituales del mundo. Con la participación de Clémentine Margaine (soprano), Roberto Alagna (tenor) y Alexander Vinogradov (bajo). Esta producción fue grabada en el Metropolitan Opera Hall de Nueva York (EE.UU.) en 2019.
Saint-Saëns - Sansón y Dalila
Domingo, el 26 de julio
Sir Mark Elder dirige la Ópera del Metropolitan en esta representación de Sansón y Dalila de Saint-Saëns. La fuente de esta popular ópera es un solo capítulo del Libro de los Jueces: Sansón, un líder premonárquico de los antiguos israelitas, lucha valientemente contra los filisteos, enemigos de su pueblo, hasta que Dalila lo seduce y le corta el pelo, el secreto de su fuerza sobrehumana. La brevedad de esta fuente no impidió que se convirtiera en una de las grandes historias de amor (o al menos de pasión) del mundo, así como la representación arquetípica de un hombre traicionado por una mujer inmoral. La ópera de Saint-Saëns, junto con otras representaciones artísticas de múltiples géneros, ha tenido un papel importante en la popularización de esta historia. Con Elīna Garanča (mezzosoprano), Roberto Alagna (tenor) y Elchin Azizov (barítono). Esta producción fue grabada en el Metropolitan Opera Hall de Nueva York (EE.UU.) en 2018.